Lima limón pero endulzada, distinta, con colores y neblina, fría y soleada, pobre y rica, entretenida y aburrida, concreto y mar, cultura y comercio. Esta ciudad me ha gustado por sus tonos y sus contados pero particulares lugares. No me imagine alguna vez visitar calles de ese país, de esa ciudad. Aún así la facilidad de conocer gente se lo lleva la noche y el alcohol, como en casi todos los lugares.
Sin poder estar los días suficientes, me he quedado con apenas unos pestañeos.
Maldición llevo 5 minutos viendo esta foto.