Cuando crecemos, una de las cosas que más recordamos, son los juegos que hemos creado o inventado. Asimismo, existían otros que ya habían sido el pasado de algunos vivos, en realidad, nunca supe como se llamaba este juego, le decía el limbo, luego el baile del palo y ahora, luego de muchos años, me doy cuenta que le llaman la cuerda.
No tiene mayor importancia como le digan, al final, los nuevos niños de la tierra se siguen divirtiendo y, más aún, si existe un escenario de lodo.